miércoles, 19 de octubre de 2022

MIGUEL ÁNGEL ARBEA

Hoy le vamos a dedicar la página al músico y guitarrista (y peluquero) navarro Miguel Ángel Arbea Aranguren (Pamplona, Navarra, 1939 - La Coruña, 2003). Su vocación guitarrística no se manifiesta hasta 1957, cuando comenzó a cursar estudios de armonía y composición en el Conservatorio de Pamplona, y continuó perfeccionando su formación como guitarrista con Remigio Sainz de la Maza. También estudió armonía con Fernando Remacha. En 1961 concluye los cursos oficiales de la carrera en el Conservatorio de Madrid, cosechando triunfos en sus actuaciones por España y Francia.

 

Desde 1970, compaginó su obra concertística con la de cantautor, presentándose a diferentes concursos y grabando discos. Aquí lo traemos porque, en su faceta de cantautor, le ha dedicado trabajos a León Felipe y a Miguel de Cervantes

 

 

 

 

 

 

 

También fue el autor del libro de poemas “La felicidad posible” (Pamplona, Autor-editor 46, 1987). ISBN: 978-84-404-0690-3. Murió con 64 años.

 


 

 

 

 

 

 

 

Éstas son sus grabaciones:


Miguel Arbea. Recital de guitarra,

SP (Columbia QEN 7859, 1965).

 

 

 

 

 

A. Suite en Re Menor (Robert de Visée)

Preludio

Zarabanda
Minueto
Burré

B. Preludio n.º 1 (Héctor Villalobos)

 

En la trasera de la carpeta, un texto nos dice:

Miguel Ángel Arbea Aranguren nace en Pamplona en 1939. Su vocación guitarrística no se manifiesta hasta 1957, tras haber cursado brillantemente estudios de armonía y composición en el Conservatorio de su ciudad. En 1961, en el Conservatorio de Madrid, concluye los cursos oficiales de la carrera. Estudia con ahínco y eso le conduce a cosechar abundantes triunfos en sus actuaciones en España y Francia. Miguel Ángel Arbea posee cualidades que le sitúan entre los más destacados valores de la joven generación guitarrística. Su técnica depurada está al servicio de su exquisita sensibilidad, de su sinceridad musical y de su gran personalidad artística.

 

 

 

VV. AA: IV Festival Nacional de Villancicos Nuevos, 1970. Pamplona

LP (Belter 22.496, 1970).
 


 

 

 

 

 

B6. Villancico de la noche y el campo (E. Rodríguez, Miguel Arbea).

Canta: Miguel Arbea.

 

 

Miguel Arbea

SP (Iberia - Columbia Z 1001, 1971).

 

 

 

 

 

A1. Cantaré a quien siembra (Miguel A. Arbea).
A2. Bakardadea (Miguel A. Arbea).

BAKARDADEA

 

B1. Canta, poeta, al hombre (Miguel A. Arbea).
B2. ¿Dónde estás, padre? (Miguel A. Arbea).

Miguel Ángel Arbea y Francisco Lasheras: guitarra; Luis Felipe Eseverri: órgano

 

 

Mikel Arbea: Euskal doinuak gitarraz,

LP (Herri Gogoa - Edigsa HG-67LS, 1973).

Con libro de partituras.

 

 

 

 

 

 

 

 A1. Itsasoa laño dago.

A2. Goizean goizik.
A3. Txori erresiñula.
A4. Ezpata dantza.
A5. Adio ene maitea.
A6. Hiru erregek.
A7. Oi eguberri gaua.




 




B1. Zugana Manuela.
B2. Plañu niz bihotzetik.

B3. Aurresku:
B3a Aurkez-aurkez.
B3b Esku aldatzeko soiñua.
B3c Kontrapassa.
B3d Zortzikoa.
B3e Biribilketa.
B4. Nere etorrea.
B5. Agur jaunak.

 

 

 

Miguel Ángel Arbea: Euskal abestiak,
MC (Portadores de Sonido 177-099.304, 1974).
CAR (Portadores de sonido 205.054.304, 1974).

 

 

 

 

 

 

 

A1. Urrundik (popular)

A2. Txoriñuak kaiolan (popular; arr., M.A. Arbea).
A3. Euskal mendietan (Miguel A. Arbea).
A4. Itxasoa (popular; arr., Miguel A. Arbea)
A5. Zeruan eder ilargia (popular; arr. Padre Donostia).
A6. Adios, ene maitia (popular; arr. P. Donostia).
A7. Ereiten duana (Miguel A. Arbea).

B1. Udaberriari abestia (Miguel A. Arbea).
B2. Illuntzean (Miguel A. Arbea).
B3. Xarmegarria zira (popular; arr. Miguel A. Arbea).
B4. Poeta, gizona abestu (Miguel A. Arbea).
B5. Iru errege orienteku (popular).
B6. Nere etorrera (José M. Iparraguirre; arr. Miguel A. Arbea).
B7. Txori erresiñula (popular)

Canta: Miguel Ángel Arbea; piano: Miguel Ángel Otaegui; Luis Arbea: guitarra.

 

 

 

VV. AA: XI Festival de villancicos nuevos. Pamplona, navidad, 1977,
LP (Tic tac TTD-001, 1977).

 

 

 

 

 

 

 

B3. Y no es tan buena la noche (Letra y mística: Miguel Ángel Arbea).

Canta: Miguel Ángel Arbea.

 

 

Miguel Ángel Arbea: Homenaje a León Felipe,

MC (Arión 200-B-157, 1991).

 

 

 

 

 

 

 

 

En el interior de la caratula, un texto de su hermano Luis Arbea, nos dice:

La poesía de León Felipe recorre el espacio desolado y trágico del exilio, al mismo tiempo que transpira el aire enrarecido del desarraigo existencial del poeta. 

En ese angustioso espacio -interior, exterior- ¡qué difícil precisar el por qué y el cómo de la existencia humana! y ¡qué duro averiguar unas pocas verdades esenciales o abrir ventanas interiores por donde pueda entrar la LUZ! En un mundo manipulado por mercaderes y matones “¡Cuesta tanto disolver las siniestras y aniquiladoras sombras penetrándolas de LUZ!”.

“Toda la luz de la tierra la verá el hombre por la ventana de una lágrima...”. El grito quijotesco, desgarrado y beligerante de León Felipe (trascendiendo su propia biografía) se eleva hacia el reino de la luz, hacia la plasmación real de una justicia y dignidad humanas sin las cuales el mundo no es sino caos y el hombre un animal monstruoso.

“Hay que encender una estrella...”.

Frente al sombrío mundo de los vendedores de oscuridad, frente a la indiferencia o el silencio de los dioses, al hombre sólo le queda un arma irreductible: el llanto, la voz, la blasfemia convertida en plegaria, la canción... Aunque los guerreros y mercaderes se queden con la hacienda, el poeta "se lleva la canción": una canción estremecida por el llanto, pero también portadora de esencial esperanza... Cuando cada hombre encienda su estrella, sobre el tenebroso mundo de los sembradores de sombras brillará radiante la LUZ.

Este “Homenaje a León Felipe” quiere ser un gesto de reconocimiento a la importancia de la obra del poeta. Por otro lado, pretende mostrar sencillamente (cantados en formas populares) la viva actualidad de contenido que encierran sus poemas: actualidad indiscutible, pues León Felipe describe sin retóricas la lucha heroica del hombre por dar sentido a la precariedad de su condición, en el intento esperanzado de superar nuestra soledad y tragedia profundas.

L. Arbea

Los temas son:

A1 ¿Por qué?
Poema “Envío” del libro El payaso de las bofetadas y el pescador de caña. Poema trágico español (1938).

¿POR QUÉ?

A2 Canción marinera.
Poema XXVII de la sección Libro segundo (1930) del libro Versos y oraciones de caminante (1920; 1930).

CANCIÓN MARINERA


A3. Que venga el poeta.
Poema V de la sección “Epílogo” del libro Ganarás la luz (1943).

QUE VENGA EL POETA

A4. Y sé todos los cuentos.
Poema “II. Sé todos los cuentos”, de la sección “Un signo… quiero un signo”, del libro Llamadme publicano (1950).

Y SÉ TODOS LOS CUENTOS

A5 Quiero…sueño.
Poema de la sección “Un signo… quiero un signo”, del libro Llamadme publicano (1950).

 

QUIERO…SUEÑO

B1 Ahora me voy. 
Poema VII de la sección “Epílogo” del libro Ganarás la luz (1943).

AHORA ME VOY

B2 Me voy porque la tierra ya no es mía.
Poema VIII de la sección “Epílogo” del libro Ganarás la luz (1943).

ME VOY PORQUE LA TIERRA YA NO ES MÍA

B3 La noria. 
Poema XII “No es lo que me trae cansado”, de la sección “Libro primero” (1920) del libro Versos y oraciones de caminante (1920; 1930). Apareció posteriormente en la sección “Las medidas” del libro “El ciervo” (1958) con el título “La noria”.


LA NORIA

B4 Mía es la voz.

Poema “Reparto” de la sección “Libro primero” del libro Español del éxodo y del llanto (1939). Apareció también en la sección “Libro I. Algunas señas autobiográficas” del libro Ganarás la luz (1943), poema VII, con el título “Hay dos Españas”.

MÍA ES LA VOZ

Poemas: León Felipe; música: Miguel Ángel Arbea; arreglos musicales: Jesús Rey y Miguel Ángel Arbea; canta: Miguel Ángel Arbea; guitarra: Jesús Rey y Miguel Ángel Arbea.

 

Miguel Ángel Arbea: Recordando a Cervantes,
CD (Arión 202B1858, 2002).

 

 

 

 

En el interior del libreto, un texto del cantante, nos dice:

Recordando a Cervantes reúne canciones que escribí hace años, junto a otras de cuño más reciente. Completo el conjunto con dos “quijotescos” poemas de León Felipe y un hermoso soneto de J. L. Borges -retrato excelente del autor del Quijote-. Con ello intento homenajear modestamente a Cervantes (hermano mayor en letras y actitudes vitales) ahora que se va aproximando el cuarto centenario de la primera publicación de su Quijote. Tengo también la ilusión de que esta labor mía sirva para recordar a mis amigos las extraordinarias perspectivas que deja ver el paisaje cervantino.

“... Pero yo apostaré que (el cura) debe tener puntas y collares de poeta; que los tenga también Maese Nicolás no dudo en ello porque todos, los más (barberos), son guitarristas y copleros”.

(D. Quijote, cp. LXVII, parte II)

Coincido en oficio y aficiones con Maese Nicolás ¡Qué bien si coincidiera igualmente en las puntas y collares de poeta!

 

Otro texto del cantante, nos dice:

En diciembre de 1904, poco antes de publicar Vida de D. Quijote y Sancho, Miguel de Unamuno escribía a su amigo Pedro de Múgica “Cervantes es un pobre diablo inferior a su obra y lo que pudo decir me trae totalmente sin cuidado”, “El texto cervantino no es sino un pretexto para que sobre él levante yo mis propias elucubraciones”.

En este punto a mí me sucede algo bien diferente: cuanto más leo las peripecias del Ingenioso Hidalgo, más admiro, más quiero a Cervantes y más me interesa lo que quiso decir en sus escritos. Además, me parece imposible que alguien pueda escribir una de las obras cumbres de la literatura universal desde una experiencia “vital de pobre diablo”. La desdicha y el infortunio que hostigaron casi siempre la existencia de Cervantes tienen fiel traducción en la malaventura y en los contratiempos sufridos por Don Quijote y por Sancho, transposición literaria del pensamiento y del vivir de un hombre excepcional.

 

Al paso de sus necesidades cotidianas, imagino al caballero Cervantes sobre el rucio de Sancho, y al galope de su coraje y de sus sueños, cabalgando oscuro por su “dura España” sobe el magro espinazo de Rocinante. Desdoblamiento cervantino que describe bien las fuerzas vitales que nos impulsan y que expreso cloro que, en alguna medida, en todo ser humano alientan un Don Quijote y un Sancho, dualismo ente lo real y lo soñado, entre lo sensible y el inherente anhelo del hombre de trascenderse a sí mismo, de ser “más que hombre”.

Bajo el disfraz de delirantes aventuras hiladas con sutil ironía, Cervantes pone de Manifiesto nuestro efímero pasar sobre la Tierra: sugiere lo que pasa, peto también lo que permanece; señala lo precario, pero igualmente la colectiva demanda humano de eternidad, Meto trascendente que Cervantes busca en la lucha contra el mal y la injusticia de este mundo, en lo defensa, a todo trance, de los derechos de los más débiles y oprimidos.

“Bacía, yelmo, halo, este es el orden, Sancho”. Es decir, de lo doméstico a lo épico, de lo épico a la mística, en fin, de lo sórdido a la luz. Con esta premisa, Cervantes armonizo todas las incertidumbres y contradicciones de la vida, y abre de par en par un balcón desde el que se puede ver y sentir que, en esencia, YO SOY EL OTRO.

M. A. Arbea

Un soldado de Urbina (poema recitado de Jorge Luís Borges)


1. La del alba sería (Miguel de Cervantes).
De aquel noble amanecer que luminoso acogía la formidable aventura ..celosa estaba la luna

 

LA DEL ALBA SERÍA
 
2. Nunca fuera caballero (Miguel de Cervantes).
Pero tiempo vendrán en que las vuestras señorías me manden y yo obedezca.

 

NUNCA FUERA CABALLERO

 

3. Vuelve, don Quijote, vuelve (Miguel Ángel Arbea).
Anhelante de tu lanza –tantos siglos azotados- te aguardan esperanzados los niños de Quintanar.

4. Edad dorada (Miguel de Cervantes).
Puedo soñar esta noche los versos más hermosos. Soñar, por ejemplo, que la justicia es el único aliento del hombre y que tuyo, también, es mi corazón.

 

EDAD DORADA


5. Saludo a Rocinante. Poema “Saludo I” del libro Rocinante (1969) del León Felipe.
Rocinante, aunque no tengas “pedigree”, ni el bucéfalo de Alejandro, ni Babieca el del Cid, contigo se igualan.

 

SALUDO A ROCINANTE


 

6. También yo he visto gigantes (Miguel Ángel Arbea).
Que esta es buena guerra, sancho, y es gran servicio de Dios quitar tan mala simiente de sobre la faz de la tierra.

7. Retrato de Dulcinea (Miguel de Cervantes).
Me preguntaron los dioses ¿Cómo es ella? Alejaos, respondí: su boca os hará humanos y en sus ojos perderéis la libertad.

 

RETRATO DE DULCINEA


 

8. Historia triste (Miguel Ángel Arbea).
Puedo escribir los versos más tristes de la historia. Escribir, por ejemplo: el hombre devora al hombre y sus hijos crecen sin esperanza. Puedo sentir, y siento, los versos más amargos de la historia.

9. Vencidos… Poema de la sección Libro primero (1920) del libro Versos y oraciones de caminante (1920; 1930).
Míos son tu llanto y tu amargura, de los ángeles, tu redentora ofrenda: por cada lágrima del hombre un infinito de estrellas.

 

 

VENCIDOS


10. Hora de partir (Miguel Ángel Arbea).
Ni mortajas, ni sudario, desnudo: solo un cayado blanco y ese perro fiel que atiende por justicia de todos los hombres.

11. El baciyelmo es un halo (Miguel Ángel Arbea).
Recuperaste, poeta, el fuego que ilumina tu corona: esa luz celestial que fundirá las cadenas de todos los hombres”. 


 

CD COMPLETO